En un giro que transforma el exclusivo barrio de Polanco en epicentro de un thriller urbano, un hombre fue asesinado a balazos esta mañana en el interior de Micky’s Hair Salón, un icónico salón de belleza frecuentado por celebridades y ejecutivos de la alta sociedad mexicana. El crimen, perpetrado alrededor de las 10:30 horas en la colonia Anzures –a dos pasos de avenidas como Masaryk y Molière–, ha desatado una investigación inmediata por parte de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX), que apunta a posibles motivos pasionales o deudas pendientes en el mundo del espectáculo.
La víctima, identificada preliminarmente como Eduardo “El Memo” Ramírez, de 42 años, era un estilista de renombre con más de 20 años de trayectoria en el salón, donde atendía a figuras como actrices de telenovelas y modelos de pasarela. Según testigos oculares, un sujeto encapuchado ingresó al establecimiento disfrazado de cliente, solicitó un corte de cabello y, en un momento de distracción, sacó un arma calibre 9 mm para disparar a quemarropa contra Ramírez, quien cayó desplomado sobre una estación de peinados. “Estábamos en plena sesión de manicura cuando oímos los tiros. Pensamos que era un petardo, pero al ver la sangre… fue horrible”, relató una empleada del salón a este medio, aún temblorosa, bajo condición de anonimato. El agresor huyó en una motocicleta negra, dejando tras de sí un rastro de casquillos y pánico entre los clientes matutinos.

La escena del crimen, acordonada por elementos de la Policía Bancaria e Industrial (PBI) y peritos de la FGJCDMX, reveló un salón de belleza convertido en caos: espejos salpicados de sangre, tijeras esparcidas y un aroma a laca mezclado con el olor metálico de la pólvora. El titular de la coordinación territorial Cuauhtémoc, Omar García Harfuch –quien ha liderado operativos contra la delincuencia en la zona–, confirmó en un tuit matutino que se han revisado cámaras de videovigilancia de la colonia, capturando imágenes nítidas del sospechoso. “Tenemos una línea de investigación sólida. No permitiremos que Polanco se convierta en tierra de nadie”, escribió el funcionario, aludiendo a un posible vínculo con extorsiones a negocios de lujo en la zona, que han aumentado un 25% en lo que va del año según datos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC).
Micky’s Hair Salón, fundado en los años 80 y conocido por sus cortes vanguardistas y su clientela VIP –incluyendo rumores de visitas de políticos y estrellas de Netflix–, emitió un comunicado esta tarde expresando “profundo dolor” por la pérdida de Ramírez, descrito como “un pilar de nuestra familia”. El establecimiento, ubicado en un edificio art déco en la calle Leibnitz, cerró temporalmente sus puertas, dejando a decenas de citas canceladas y a un barrio que suele presumir de elegancia sumido en la incredulidad. Vecinos y dueños de boutiques adyacentes reportan un clima de temor: “Polanco es nuestro oasis, pero estos balazos nos recuerdan que la violencia no respeta postales”, comentó un joyero local.
Este asesinato se inscribe en una serie de incidentes violentos que han empañado la imagen dorada de la colonia: hace apenas tres meses, un robo a mano armada en un restaurante francés dejó dos heridos, y en julio un ajuste de cuentas en un valet parking cobró una vida. Expertos en criminología, como el profesor Javier Oliva de la UNAM, atribuyen estos eventos a la “infiltración de células delictivas en economías informales de lujo”, donde estilistas y personal de servicio se ven envueltos en redes de usura o favores ilícitos. “El glamour oculta sombras; Ramírez podría ser solo la punta del iceberg”, advierte Oliva.
Mientras la FGJCDMX ofrece una recompensa de 300 mil pesos por información que lleve a la captura del responsable, la comunidad de Polanco organiza una marcha silenciosa esta noche en memoria de “El Memo”. Su muerte no solo silencia las tijeras de un artista del cabello, sino que cuestiona la fragilidad de un paraíso urbano donde el lujo y el peligro coquetean demasiado cerca.
 
		
