En un golpe contundente contra las redes de narcotráfico transnacional, autoridades de Florida anunciaron hoy la incautación de 173 kilogramos de cocaína, con un valor estimado en la calle de hasta 17,3 millones de dólares. El cargamento, oculto en un tráiler que presuntamente partió desde la frontera México-Texas, fue interceptado en la Florida Turnpike, evitando que la droga llegara a las calles del sureste de Estados Unidos.
El decomiso, realizado el pasado 5 de octubre pero revelado este jueves por la oficina del gobernador Ron DeSantis, resultó de una operación conjunta entre la Patrulla de Caminos de Florida (FHP) y la Administración para el Control de Drogas (DEA). Según el informe oficial, agentes de la Unidad de Interdicción Criminal de la FHP detectaron un “camión semirremolque sospechoso” que se dirigía hacia el sur de Florida. Durante la inspección en la autopista, los oficiales hallaron una puerta trampa que ocultaba múltiples sacos llenos de la sustancia ilícita, equivalente a unas 381 libras de cocaína pura.
“Detuvimos 173 kilogramos de cocaína valorados en 17,3 millones de dólares antes de que llegaran a nuestras calles”, celebró el gobernador DeSantis en un comunicado, enfatizando el impacto de la medida en la seguridad pública del estado. El vicegobernador Jeanette Nuñez, quien supervisó parte de la operación, añadió: “Nuestro mensaje a los traficantes es claro: no traigan su veneno a Florida. Seguiremos trabajando sin descanso para proteger a nuestras comunidades.
La alerta inicial surgió de inteligencia compartida que vinculaba el vehículo con rutas de contrabando originadas en la frontera sur de Estados Unidos, específicamente en Texas. Dave Kerner, director ejecutivo del Departamento de Seguridad en las Carreteras y Vehículos Motorizados (FLHSMV), atribuyó el éxito del operativo al endurecimiento de las medidas fronterizas. “Con la frontera sur cerrada, los carteles transnacionales ya no pueden cruzar libremente con drogas, armas y mensajeros humanos. Esto los obliga a usar métodos de transporte más visibles, como camiones en autopistas, lo que nos permite interceptarlos y rastrear el origen de estos cargamentos”, declaró Kerner en una conferencia de prensa matutina.
Expertos en narcotráfico señalan que este tipo de incautaciones refleja la evolución de las tácticas de los cárteles mexicanos, que han intensificado el uso de vehículos comerciales para evadir los controles peatonales y marítimos. “Florida se ha convertido en un punto clave de distribución para la cocaína que ingresa por el suroeste”, explica la analista de seguridad Laura Mendoza, de la Universidad de Miami. “Este decomiso no solo quita millones de dólares a las redes criminales, sino que interrumpe cadenas de suministro que alimentan la crisis de adicciones en todo el país”.
Hasta el momento, no se han revelado identidades de los sospechosos detenidos, pero las autoridades confirmaron al menos un arresto durante la parada del vehículo. La investigación continúa para desmantelar posibles conexiones con organizaciones mayores.
El gobernador DeSantis, reelegido en 2022 con un enfoque duro en inmigración y drogas, ha invertido millones en tecnología de vigilancia para autopistas y puertos. “Florida no será un puente para el caos proveniente del sur”, reiteró en su mensaje, alineándose con la retórica federal sobre el control fronterizo en medio de las tensiones bilaterales con México.
Organizaciones como Madres Contra la Droga aplaudieron la acción, pero advirtieron que es solo un paso. “Cada kilo interceptado salva vidas, pero necesitamos más recursos para la prevención y rehabilitación”, dijo su directora, Elena Vargas, en un tuit difundido esta mañana.
Mientras las autoridades federales y estatales celebran este logro, el incidente subraya la persistencia del flujo de drogas a través de la vasta red de carreteras estadounidenses. Para Florida, esta victoria refuerza su rol como baluarte contra el narcotráfico, pero también recuerda que la batalla está lejos de terminar.
 
		
